1 de Reyes 17 :1-3 Dios tenía un propósito más allá de lo que el profeta Elías sentia, el arroyo al que fue enviado solo fue un lugar de transición que lo iba a entrenar para una dimensión mayor.
Era necesario que el arroyo se secara con el fin de desacomodarlo en lo que él se sentia seguro.
El plan de Dios no era que su profeta se quedara en un lugar, ya que Dios habia previsto la vida de una viuda en cuya casa se había decretado muerte.
El propósito de Dios era que Elias fuera en la manifestación de su poder, para llevar vida.